Pero todo cambió en 1984, cuando el draft del ’84 consigo al nacimiento de la mayor estrella de la historia del baloncesto mundial; Michael Jordan, que cambiaría la historia del baloncesto para siempre. Desde su fundación, el 16 de enero de 1986, los Bulls siempre fueron un equipo más de la NBA, un equipo que pasaba desapercibido y pocas veces era visto como una amenaza por los gigantes de la época, como Knicks, Sixers, camisetas nba Lakers o Celtics.